Iglesia de Santiago

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Panorámica de la iglesia de Santiago desde su lado sur. A la derecha se aprecian los restos de la capilla de la Encarnación, dañados por el aparcamiento colindante.

La Iglesia de Santiago es conocida también con el nombre de iglesia de Jesús debido a que en ella se encontraba la imagen de Jesús Nazareno [1] [2] [3].

Historia

La iglesia de Santiago o Jesús se sitúa en la parte alta del barrio antiguo de Tarifa o aljaranda, pegada a la muralla medieval de origen musulmán.

La iglesia, que se debió levantar sobre una antigua mezquita, está datada entre los siglos XIV o XV y fue parroquia de la ciudad hasta el siglo XVI en que pierde protagonismo a causa de las nuevas iglesias de San Mateo y San Francisco, situadas en la parte baja del pueblo. La iglesia pasó a ser desde ese momento ermita, donde se ofrecía culto a Jesús Nazareno, por este motivo dejó de denominarse Santiago y a conocerse como iglesia de Jesús.

A principios del siglo XIX la iglesia de Jesús presentaba muchas deficiencias, por lo que se solicita se repare la bóveda, el presbiterio y dos capillas que estaban en estado ruinoso. Pero parece ser que no fue atendida dicha petición y a mediados del mismo siglo la iglesia es utilizada para la fundición de las campanas de la iglesia mayor de San Mateo, circunstancia que agravó su situación.

El estado en el que quedó la iglesia con motivo de la fundición de las campanas fue lamentable, quedó dañada la techumbre con dos orificios, el pavimento escarbado con profanación de sepulcros y el precioso retablo, la cúpula y las paredes quedaron ennegrecidas.

En este momento la iglesia tuvo que dejar de atender a los escasos feligreses y quedó abandonada.

La mayoría de los objetos de culto pasaron a la mencionada iglesia de San Mateo, también sus archivos e imaginería, que hoy día se conservan, como el altorrelieve de Santiago, la imagen de Jesús Nazareno o la de San Juan Evangelista.

En la primera mitad del siglo XX la iglesia es vendida por el Obispado a los hermanos Manuel y Joaquín Pérez Gutiérrez para su utilización como material de derribo.

Afortunadamente no se llevó a cabo el proyecto de demolición. No obstante, ante el estado ruinoso de la espadaña, en la década de los años sesenta el aparejador municipal emitió un informe pidiendo a los propietarios su derribo, bajo amenaza de multa de quinientas pesetas.

Los propietarios decidieron tirar la espadaña, para lo que se sirvieron de un tractor, que ató una cuerda a la parte superior de la espadaña. Pero todos los intentos fueron en vano y el símbolo más emblemático del monumento permaneció en pie.

A finales del siglo XX y a iniciativa de Joaquín Pérez Castro los herederos de los propietarios devolvieron la propiedad al Obispado. Los trámites de asentamiento en el Registro de la Propiedad se prolongaron bastantes años, y en los primeros años del siglo XX la iglesia de Santiago quedó definitivamente en propiedad del Obispado.

En el año 2015 el Ayuntamiento de Tarifa firmó un convenio con el Obispado en el que se cedió su propiedad al municipio.

El monumento

Vista de la iglesia tomada desde su lado norte.

La iglesia está orientada en sentido este-oeste, ocupa una extensión de 510 metros cuadrados y es de una sola nave.

El pie de la iglesia, orientado al oeste, es la parte mejor conservada del edificio.

La espadaña es de tres huecos, dos en un piso inferior y otro más pequeño en el superior; se conserva en pie, si bien su estado es muy delicado por presentar diferentes grietas que hacen muy peligrosa su integridad. Este es el elemento más identificativo del monumento, destacando por encima de los tejados de la parte alta del pueblo.

La puerta de entrada a la iglesia, situada bajo la espadaña está dotada de un arco de medio punto. Se tiene noticias de una claraboya que se encontraba entre la puerta y la espadaña y que fue retirada en algún momento tapiándose posteriormente el lugar que ocupaba.

El altar mayor se encontraba en la cabecera, no tenía un ábside semicircular ni poligonal propio de las iglesias, debido a que al estar pegado a la muralla, era recto para adaptarse a ella

La nave no conserva nada de su cubierta, que era de madera, pero sí la mayor parte de sus muros, con arcos de medio punto. A día de hoy la nave está cubierta de escombros, situación favorable para la conservación, tanto de los muros como de la solería, en espera del momento en que el monumento se intervenga.

En el lado sur se conserva un muro con contrafuertes en buen estado.

Capillas

Al lado del Evangelio (en la parte izquierda según se mira al altar) se conserva en pie una capilla llamada de la Concepción, clasificada como gótica. Aún conserva en buen estado su cubierta, con bóveda de crucería con nervaduras en piedra, en cuyos remates se encuentran labrados los símbolos de los evangelistas. El acceso a ella tiene un amplio arco gótico-mudéjar peraltado, ejecutado en ladrillos. A pesar de su buen estado, la capilla está en estado de abandono.

La capilla de la Encarnación o de San Lorenzo se encuentra en el lado de la epístola (al lado derecho mirando al altar). Se han conservado sus restos, aunque en 2013 fueron muy dañados tras realizar un aparcamiento hormigonado sin control arqueológico por parte de un establecimiento hotelero colindante.

La capilla de la Encarnación fue lugar de enterramiento de familias tarifeñas; enterramientos realizados bajo bóvedas anteriores al siglo XVI, que desgraciadamente habrán desaparecido tras las obras indicadas.

Otras capillas del conjunto están derruidas y solo en una intervención arqueológica podrán ser determinadas. Igual ocurre con la sacristía, que se sabe que se encontraba pegada a la muralla, al lado del altar mayor.

Pinturas

La fachada conserva aún restos de su decoración pictórica. El paramento de la portada y la espadaña estuvieron decorados con un enfoscado blanco, sobre el que se trazó una red de cuadrados dispuestos de forma oblicua. Los colores del motivo decorativo eran rojo almagra, amarillo y blanco, con ribetes negros. Estas pinturas están hoy casi perdidas, pero en su momento debieron conferir gran vistosidad a la fachada. También se han encontrado vestigios de pinturas en el muro del evangelio.

Boquete de Santiago

Por la parte de la cabecera de la iglesia, pegada a la muralla, existe una salida al exterior que se encuentra tapiada, llamada boquete de Santiago; por ella se dice que entraron las tropas de Sancho IV el Bravo para conquistar Tarifa, que se encontraba en manos de los musulmanes.

Grado de protección

El estado del monumento en el año 2020 es de total desprotección. Se colocó una valla metálica en su atrio para protección de viandantes en caso de derrumbe de la espadaña.

Excepto la capilla de la Concepción, que está cerrada por un muro colocado en los años setenta del siglo pasado para preservarla, el resto de la nave está abierto y a disposición de vecinos o de curiosos.

El muro sur ha sufrido la agresión de un aparcamiento, realizado por un establecimiento hotelero que linda con el monumento.

El Ayuntamiento tarifeño, actual propietario del inmueble no respeta el acuerdo que se firmó en 2015 con el Obispado, en el que en una de sus clausulas se cedía el monumento al municipio.

La consecuencia es que el monumento está abandonado a su suerte. Hoy la histórica iglesia y sus alrededores muestran un lamentable espectáculo, un abandono impropio de los tiempos que corren.

La iglesia de Santiago es un monumento que está en el centro de Tarifa y que está llamado a ser en el futuro un centro cultural de primero orden.

Lista Roja del Patrimonio

Desde Julio de 2017 la iglesia de Santiago o de Jesús se encuentra en la lista roja del Patrimonio Nacional, lista que elabora la Asociación de defensa del Patrimonio Nacional "Hispania Nostra" [4]. En esta lista se encuentran recogidos todos aquellos monumentos que sufren estado de abandono y de posible pérdida irreparable de su integridad.

Peticiones ciudadanas para su rehabilitación

Desde el monumento en que el monumento pasó a ser propiedad del Ayuntamiento de Tarifa, numerosos ciudadanos apuestan por su rehabilitación, solicitando la consolidación de las zonas que se encuentran en peligro de derrumbe, la intervención con fines de disfrute de la población y la puesta en valor de uno de los monumentos más destacados de Tarifa. Sin embargo las peticiones de ciudadanos y asociaciones no son atendidas y el monumento se encuentra en estado de total abandono.

Referencias

  1. GÓMEZ DE AVELLANEDA SABIO, Carlos: "La iglesia de Santiago", Aljaranda 0 (1991) 17-21.
  2. CRIADO ATALAYA, Javier: "Nuevos datos sobre las iglesia de Santamaria y Santiago)", Aljaranda 27 (1997) 22-25.
  3. PATRÓN SANDOVAL, Juan A. y CAZALLA URBANO, Rafael: "El relieve de la anunciación de la Iglesia Mayor de San Mateo en Tarifa", Almoraima 46 (2017) 173-186.
  4. HISPANIA NOSTRA: "Lista Roja del Patrimonio"